¿Qué es la lactancia materna y por qué es importante? 

Explora la esencia de la lactancia materna: nutrición vital y lazo emocional entre madre e hijo. ¡Descubre su impacto en el bienestar de tu recién nacido!

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Explora la esencia de la lactancia materna: nutrición vital y lazo emocional entre madre e hijo. ¡Descubre su impacto en el bienestar de tu recién nacido!


Más allá de su función biológica, la lactancia materna crea un puente de amor y vitalidad entre una madre y su recién nacido. Adicionalmente, este proceso le proporciona a tu bebé los nutrientes y anticuerpos necesarios durante su desarrollo.


Continúa leyendo y aprende qué cuidados debes contemplar durante el proceso de la lactancia materna


¿Por qué es importante la lactancia materna?


Desde el momento en que un bebé llega al mundo, la lactancia materna se convierte en su primer y más vital vínculo para su desarrollo. Esta sustancia proporciona los nutrientes esenciales para su crecimiento; además, su fácil digestión y absorción la hacen fundamental en los primeros meses de vida.


La leche materna actúa como un defensor inmunológico brindando al bebé protección contra diversas infecciones y enfermedades.


Adicionalmente, la lactancia materna tiene un impacto económico y ambiental significativo. Por ejemplo, las familias pueden ahorrar en gastos relacionados con la compra de fórmulas infantiles, biberones y otros productos. Asimismo, este proceso no requiere la producción masiva de productos industriales ni genera residuos, lo que contribuye a la protección del planeta.


La Asamblea Mundial de la Salud (WHA) ha establecido metas concretas para aumentar la tasa de lactancia materna exclusiva en los primeros 6 meses de vida de los bebés. Además, este organismo busca elevar la tasa de lactancia materna exclusiva en los primeros seis meses de vida al 50% para el año 2025.


¿Qué cuidados se deben tener durante la lactancia materna?


En la Clínica del Country somos una institución amiga de la mujer y de la infancia integral; es por eso que hemos venido trabajando en la implementación de estrategias precisas en busca de un modelo con altos estándares de atención para esta población. De esta manera, para que tu etapa de lactancia salga de la mejor forma posible, te damos las siguientes recomendaciones:


Alimentación balanceada:


Una madre lactante necesita asegurarse de que su cuerpo esté nutrido adecuadamente para producir leche de calidad. Una dieta rica en fibra, vitaminas, minerales y proteínas proporciona los elementos esenciales que se transfieren a través de la leche materna al bebé. Si la madre no consume una variedad de alimentos nutritivos, su organismo puede agotar sus reservas.


Hidratación:


La hidratación es fundamental para la producción de leche materna, ya que la leche está compuesta en gran parte por agua. Durante la lactancia, el cuerpo de la madre necesita más líquidos de los habituales para mantener la producción de leche y apoyar las funciones metabólicas. Beber al menos 13 vasos de agua de 8 onzas al día ayuda a prevenir problemas como el estreñimiento, comunes en el período posparto y contribuye a la recuperación física después del parto.


Cafeína y lactancia:


Disfrutar de una taza de café puede ser tentador, pero es importante moderar el consumo de cafeína durante la lactancia. Alrededor del 1% de la cafeína ingerida por la madre puede pasar a la leche materna y afectar al bebé, causándole irritabilidad o problemas para dormir. Limitar el consumo y optar por alternativas descafeinadas puede ser una opción para asegurar el bienestar del bebé.
Vida saludable y ejercicio


En lugar de someterse a dietas estrictas, una madre lactante debe centrarse en llevar un estilo de vida saludable. Esto incluye la incorporación de una variedad de alimentos nutritivos y equilibrados en su dieta diaria. Además, la práctica de ejercicio físico suave como caminar o hacer yoga puede contribuir a la recuperación posparto y mejorar el bienestar general de la madre.


Efectos del alcohol:


Si bien un consumo moderado de alcohol puede ser aceptable para algunas madres lactantes, el exceso puede tener un impacto negativo en la producción de leche. El alcohol puede interferir con la secreción de prolactina y oxitocina, hormonas esenciales para la producción y liberación de la leche. Por lo tanto, se aconseja abstenerse de consumir alcohol en los primeros meses de lactancia para garantizar una producción de leche óptima y segura para el bebé.


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